Contenido

«La mirada de Carlo Padial sobre las cosas y sobre las relaciones sociales es desquiciada y turbadora, pero su sentido del ritmo tiene precisión de relojero. Un libro estupendo.» IGNACIO VIDAL-FOLCH

Barcelona, 16 de junio de 2026. Amaia, una estudiante sin familia y sin un hogar definido, acaba por aceptar la proposición de Abel para unir sus vidas enfrentándose a una enfermedad devastadora para la cual ya había empezado la cuenta atrás. Desconocen el tiempo que les queda juntos, pero los dos son conscientes de que nada será fácil de ahora en adelante. La pasión de ambos por los libros, el descubrimiento de un manuscrito inédito y una dolorosa pérdida nos transportarán a un tiempo pasado y darán paso a un futuro forjado en la oscuridad del presente.

David piensa que la vida que le ha tocado es muy aburrida. Todo está descubierto, no hay ningún misterio por resolver, ninguna tierra que explorar. Pero el mundo es mucho más grande de lo que él piensa y su encuentro con una misteriosa chica le hará darse cuenta. ¿Será el nuevo mundo que ha descubierto demasiado para David? ¿O será él demasiado para el mundo?

Oslo, 1968. En la segunda planta de un edificio al este del río se oye un disparo. Los vecinos se agolpan inmediatamente en la entrada de la vivienda, pero nadie contesta. Cuando llega la policía para abrir la puerta, encuentran el cadáver de un antiguo héroe de la Resistencia noruega contra los nazis, víctima de un disparo. No hay nadie más en el interior del piso, ni arma homicida, ni existe la posibilidad de haber huido sin ser visto. El joven y arrogante inspector encargado del caso se encuentra ante un misterio en apariencia irresoluble. No sabe cómo avanzar hasta que se cruza en...

Esta es la segunda edición de Cuerpo divinamente humano al cabo de 22 años. El libro cuenta con las ilustraciones que hizo para el mismo el conocido pintor y dibujante cubano Roberto Fabelo. En esta edición dichas ilustraciones han sido integradas en el diseño con un equilibrio más justo del texto con la obra plástica. Además, se incluyen dibujos que no fueron usados en la primera edición. Como dice el poeta César López en su prólogo, León De la Hoz "se ha construido un escenario, su escenario, que ahora brinda, pleno y erotizado, al lector; para que lo disfrute, lo goce, lo...