Los Proverbios de Salomon

En los orígenes, el hombre moraba en el Jardín del Edén plácidamente. No le faltaba nada. Su vida era un verdadero vergel colmado de goce y felicidad, se deleitaba con todos los placeres que estaban dispuestos para que los disfrutase, y no debía preocuparse por nada. La única condición que le fue impuesta para conservar ese paraíso perpetuamente era que no comiera del Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal. Pero el hombre no logró superar la prueba y por eso fue expulsado del Jardín del Edén. Desde entonces, obtener el sustento ha sido siempre muy difícil. Pero, aun así,...

Cómo perseverar en la guerra espiritual en los últimos días Ahora, en lugar de "atar" los síntomas, ¡nosotros podemos atacar a los dieciséis hombres fuertes o espíritus demoníacos mencionados por nombre en la Biblia! ¡Si Dios los nombra, ellos son reales, y, Él nos ha dado dominio sobre ellos por medio del nombre de Jesús! En un lenguaje simple de entender, este libro... Enseña cómo dirigir nuestra atención y rápidamente identificar al hombre fuerte en cada situación. Ilustra cada hombre fuerte como un árbol mostrando sus frutos y síntomas para así identificarlos...

En la primera parte del libro, se trata de famirializar al lector con los salmos, el contexto del tempo para el que fueron compuestos, sus géneros literarios y los principales temas de espiritualidad, en un doble nivel individual y comunitario, que en ellos se reflejan. En la segunda se ofrece la posibilidad de acercarse a los salmos desde la metodología de la lectio divina, o lectura orante.

La compasión no puede ser verdaderamente transformadora, añade, hasta que no se haga extensiva a todo y a todos. Siempre humilde pero constantemente inspirador, el Dalai Lama parte del supuesto de que, en lo más profundo de nuestro ser, todos deseamos la felicidad. Y nos recuerda que para ser felices lo importante es fomentar los aspectos positivos y útiles de cada uno de nosotros a la par que atenuamos los negativos. La mejor manera de hacerlo, afirma, es cultivando la compasión. Su Santidad no limita el ámbito de su análisis a las relaciones con nuestras amistades y familiares, sino...

El 30 de junio de 1968, en el transcurso e una eucaristía celebrada en la plaza de San Pedro, el papa Pablo VI proclamó solemnemente aquella profesión de fe que acabaría recibiendo el nombre de «Credo del Pueblo de Dios». Este, aunque fue bien acogido inicialmente en España, con el paso del tiempo ha ido quedando relegado como documento de referencia importante en la conciencia de los profesores y los estudiantes de teología, y aun de los pastores de la Iglesia. La BIBLIOTECA DE AUTORES CRISTIANOS ha decidido reimprimir la edición de 1975, preparada por Cándido Pozo, con el fin de...